Seleccionar página

Luego de algunas jornadas en las cuales los factores intrínsecos del mercado prevalecieron en la formación de los precios de los commodities agrícolas que cotizan en el CME Group, hoy jueves nuevamente el riesgo geopolítico volvió tumbar las cotizaciones.

En ese marco, las inocultables complicaciones climáticas presentes en vastas regiones agrícolas del hemisferio norte, junto con la amenaza de una tercera fase “Niña” consecutiva en el sur, pasaron a un segundo plano para focalizar la atención en el conflicto latente presente entre China y EE.UU.

El gobierno de Joe Biden sigue desafiando a China con envíos regulares de legisladores estadounidenses a Taiwán. Hoy jueves arribó a la isla –sin previo aviso– la senadora estadounidense Marsha Blackburn, quien, a través de redes sociales, declaró que “EE.UU. se mantiene firme en la preservación de la libertad en todo el mundo y no tolerará los esfuerzos para socavar a nuestra nación y a nuestros aliados”.

Por otra parte, el gobierno liderado por Xi Jinping advirtió que tomará “medidas contundentes” si Canadá interfiere en Taiwán al enterarse de los planes de una delegación de legisladores canadienses sobre una posible visita oficial a la isla.

“Instamos a la parte canadiense a acatar el principio de una sola China y respetar la soberanía y la integridad territorial de China”, dijo la Embajada china en Canadá por medio de un comunicado con tono amenazante.

Por si faltaba algo más, The New York Times publicó hoy un artículo en el cual explica que las fuerzas militares chinas están construyendo un círculo alrededor de Taiwán para bloquear las comunicaciones de la isla con el exterior, lo que implicaría, en los hechos, una “invasión pasiva”.

En ese marco, los valores de todos los commodities agrícolas en el CME Group registraron hoy importantes caídas intradiarias que no se corresponden con la perspectiva de balanza de oferta y demanda de granos en el mercado de EE.UU.

Taiwán nunca ha sido gobernado por el Partido Comunista Chino ni ha formado parte de la República Popular China y la mayor parte de sus 23 millones de habitantes no desean renunciar a su soberanía o estilo de vida democrático. Sin embargo, el gobierno chino liderado por Xi Jinping considera que es parte de su territorio y en los últimos años viene aprovechando su creciente influencia comercial para aislar diplomáticamente al gobierno de la isla y amenazar a las naciones que tienen relaciones con la misma.

Un conflicto bélico entre China y Taiwán generaría una disrupción comercial entre China y EE.UU. que cambiaría por completo el mapa geopolítico del mundo tal como lo conocemos. Además –tal como sucede actualmente en el Mar Negro luego de la invasión rusa a Ucrania– obstaculizaría por demás la logística comercial en muchas naciones de la región.