Brasil tendrá este año una cosecha de granos de 243,2 millones de toneladas, un volumen histórico que superará al récord alcanzado en 2019 (241,5 millones de toneladas), de acuerdo a lo informado este miércoles por las autoridades.
La cosecha de cereales, leguminosas y oleaginosas superará en un 0,7% – lo que equivale a 1,7 millones de toneladas- a la de 2019, según la proyección difundida por el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE).
En su momento, la producción de 2019 había superado en un 6,6 % (el equivalente a 15 millones de toneladas) a la de 2018 (226,5 millones de toneladas), pero también a la de 2017 (238,4 millones de toneladas), que hasta ahora era la mayor en la historia del país.
Según informa la Agencia EFE, de acuerdo con las estadísticas del organismo, la cosecha récord de 2019 fue impulsada por la producción igualmente histórica de soja (113,5 millones de toneladas) y de algodón (6,9 millones de toneladas).
El crecimiento también fue posible dado que se aumentó en un 3,7% el área que se cosechó en Brasil en 2019, hasta alcanzar las 63,2 millones de hectáreas.
La soja, el maíz y el arroz, que son los principales productos agrícolas del país, representaron en 2019 el 87% del total del área cosechada y el 92,8% de la producción agrícola general del país.
La producción del 2020 impondrá un nuevo récord gracias a que la cosecha de soja volverá a crecer en un 7,8% en comparación con 2018, y a que la de algodón también volverá a ser histórica (7,1 millones de toneladas, con un aumento del 2,7%). La única cosecha que se reducirá será la de maíz, en un 7,2%.
La cosecha de soja en 2020 saltará 7,8% con respecto de 2019, hasta 122,4 millones de toneladas, y la de arroz crecerá 0,9% hasta llegar a las 10,4 millones de toneladas, mientras que la de maíz, que caerá 7,2%, se reducirá a 93,3 millones de toneladas.
La producción de café en grano en 2020 ascenderá hasta 3,4 millones de toneladas (56,4 millones de sacas de 60 kilos), lo que representará un crecimiento del 12,9 % frente a la de 2019, a causa de la recuperación de los precios del grano en el mercado internacional.