La cabaña Don José, situada en Necochea, participó con Con “Bravísima” y se quedó con el máximo trofeo. El Reservado Gran Campeón Hembra fue para la Cabaña Los Figari.
Gran Campeón Hembra para la cabaña Don José.
Bravísima, una vaquillona intermedia de la Cabaña Don José de Maximiliano Mammoliti fue elegida este jueves como Gran Campeón Hembra de la raza Angus de la Exposición de Palermo 2022, en una final que el jurado Javier Ezcurra calificó como excepcional.
Es la primera vez que la Cabaña Don José, de la localidad bonaerense de La Dulce, Partido de Necochea, logra un campeonato en Palermo, aunque había obtenido varios premios en otras exposiciones. Incluso esta vaquillona del Box 491 ya había sido Gran Campeón Ternera en la nacional del año pasado.
«Es lo que buscamos siempre nosotros: tamaño bien moderado, que tenga buena carne, con profundidad, bien ancha y con buena femineidad» dijo a Clarín Rural el titular de la cabaña, Maximiliano Mammoliti.
Don José fue iniciada hace 18 años en La Dulce por Mammoliti, quien hoy ve coronado su esfuerzo con este premio en Palermo.
Alfonso Bustillo, presidente de la Asociación Argentina de Angus, entregó el premio a la Gran Campeón Hembra junto a Luis Carrau, presidente de la Asociación Angus de Uruguay; Jerry Conneally, presidente de la American Angus Association; Cristian Galeano, presidente de la Asociación Angus del Paraguay; y Adrián Arrás, presidente de la Asociación Angus de México.
En tanto que el Reservado Gran Campeón Hembra correspondió al Box 400, que el miércoles había sido elegida como Mejor Ternera, un ejemplar de Cabaña Los Figari cuyos expositores son Cebey Pervan, Berardi, Ojea Rullán y Cora. La Tercera Mejor Hembra correspondió al Box 519 de Charles de Guerrero SA.
El jurado
El jurado Javier Ezcurra destacó la calidad de los animales presentados: “En mi debut en esta pista tan emblemática, me quedo más que satisfecho. Felicito a todos los criadores, a todos los que están detrás de los animales porque se rompen el lomo trabajando”.
“Para mí a los 37 años estar en esta pista es un regalo del cielo. Este saco que tengo es de mi viejo y creo que a él le debe estar gustando mucho esta final”, dijo emocionado Ezcurra mientras bajaba un cerrado aplauso de la tribuna.