“Para cuando, joven”, decía la letra de la canción que popularizó Palito Ortega allá lejos y hace tiempo. Y es la frase que elige Alfredo Paseyro, presidente de la Asociación de Semilleros Argentinos y referente del Consejo Agroindustrial Argentino, para referirse a la Ley Agroindustrial, aquella que prevé un estímulo a las exportaciones ligadas al sector agropecuario, y que se encuentra estancada en el ámbito legislativo.
“En estos dos años del Consejo (CAA) nos vinculamos con la política real, fuimos y presentamos al Poder Ejecutivo nuestras ideas, que las convirtió en un proyecto de ley. Es el mejor acuerdo negociado, con la posibilidad que la mejore el Congreso”, enuncia Paseyro explicando el origen del proyecto de ley.
Más allá de esta descripción, el dirigente se muestra optimista en el destino de esta ley, y algunos contactos lo hacen pensar que pueda llegar a aprobarse durante este año: “Técnicamente hay chances que salga este año, ya que en las sesiones ordinarias se podría hacer. Hablé con Ricardo Buryaile, (diputado y presidente de la Comisión de Agricultura) y me dijo que cuando termine el debate por el presupuesto, esto podría ser tratado y debatido. Esperemos que sí”, se entusiasma Paseyro.
“Personalmente me tocó hacer una presentación con Sergio Massa como presidente de diputados. Yo creo que lo que está fallando, y viendo cómo trabaja Brasil, es reunirnos con la política pero con autoridad para ir a reclamar, porque invertimos, damos trabajo, generamos riqueza. Con respeto, pero también con autoridad” dice el dirigente semillero.
Sobre el corazón de ley, -que oficialmente se llama Ley Agrobioindustrial-, Alfredo explica que medidas concretas y necesarias para la economía: “Si se invierte se amortiza aceleradamente, se corrige el IVA en aquellas producciones que lo tienen diferencial -como el avícola y el porcino- , aquel que engorda ganado no paga ganancias mientras tanto, además de dos incentivos concretos: Al uso de las semillas fiscalizadas, y a la recomposición de nutrientes a través de fertilizantes. Por ahí van los incentivos, que en una película, son positivas para el Estado. El acuerdo político ya está asegurado. Pero ahí está”, exclama
Paseyro también adelantó en diálogo con Bichos de Campo, que el Consejo Agroindustrial está trabajando en un master plan 2024/2028, que vería la luz posterior a la Ley Agroindustrial y que tendía otro foco: “Una economía regional no es producir soja, sino yerba, forestales, etc que requiere una previsibilidad mínima de 8 años. Estamos pensando en medidas concretas de 4 años, con la mirada integral que tiene el Consejo Agroindustrial, conformado por 60 instituciones, donde están todas las cadenas productivas. Por lo menos queremos decir cuál es nuestra idea y llevársela a todos los sectores, incluso a los sindicatos, porque vamos a generar trabajo, no solo en el sector. Estamos motivados, pero sabemos que el año próximo es de elecciones, asique vamos a trabajar el doble”, concluyó el referente del CAA.