Con una fuerte presencia sobre rutas en algunos lugares y en otros recorriendo ciudades, productores de distintos puntos del país se sumaron hoy al banderazo contra el gobierno nacional. Las consignas fueron desde la defensa de la República, la Justicia hasta reclamos por la situación general del país, entre otros puntos.
En Bell Ville, en el sudeste de Córdoba, hubo una caravana de más de 800 vehículos que encabezaron principalmente los productores. «Fue una marcha multisectorial y multitudinaria; en cada marcha se va sumando más gente. Esta convocatoria superó a la del 17 de agosto pasado», dijo a LA NACION Federico Proietti, vicepresidente de la Sociedad Rural de Bell Ville. Banderazo.
«Hay una variedad de reclamos importantes de todos los sectores, entre ellos que el Estado nacional deje de interferir en el Poder Judicial y abrir un debate innecesario. Los reclamos son múltiples, porque son marchas espontáneas, pero se ve un hastío importante de parte de la sociedad que también ve que el Gobierno no tiene un plan, más que interferir en el Poder Judicial. Solo el impuesto a la riqueza, ese ha sido el único plan, que dicho sea de paso compara la posesión de un yate con una cosechadora», apuntó. Entre algunos de los reclamos también está el pedido para poder circular entre provincias y atender los campos. «Estas son marchas que se convocan por las redes y cada uno tiene distintos reclamos», agregó Proietti.
Así se vivió la manifestación en Bell Ville, Córdoba
En tanto, en Coronel Suárez, provincia de Buenos Aires, participaron aproximadamente 250 vehículos, unos cuantos más que la última marcha, según destacaron los asistentes. «La marcha fue medio parecida a las otras, la gente llegó con carteles referidos a las tomas», dijo Fernando Cifone, productor agropecuario de esa localidad.
Cade destacar que, la última vez que productores de esa localidad participaron de una manifestación, quedaron imputados en una causa por violar el aislamiento social y obligatorio.
«A diferencia de la otra vez, hoy no había nadie, ni un solo policía en las calles, ni un móvil. Nada», destacó el productor. «Con tanta gente se nota que se llegó a un hartazgo; esta vez había gente que no había estado antes», señaló. Las consignas de la manifestación estaban puestas en la defensa de la República, la reforma judicial, entre otros temas. La caravana de autos se movilizó en los alrededores de la plaza San Martín, frente al Municipio.
En tanto, al costado de la autopista de la ruta 9, frente a la ciudad de San Nicolás, productores agropecuarios contabilizaron en su protesta más de 200 vehículos nuevos que no habían participado de la marcha 17A. Estos, dijeron, pertenecen a vecinos de la ciudad que decidieron unirse a la convocatoria.
«Todos los reclamos coinciden en que quieren un país vivible. Esta marcha fue la más grande de todas, fue más masiva, participaron muchos productores, pero también llegó la gente de la ciudad», observó Ariel Bianchi, un productor autoconvocado de la zona.
«El Gobierno va a tener que dar respuestas, esto no es solo por la política económica, el problema es otro; están aprovechando la pandemia para avanzar sobre la Justicia para coartar las libertades, y si el Gobierno no hace un viraje, cada vez va a ser peor. En la ciudad de San Nicolás no se movilizaban mucho y ahora se están organizando, y cuanto más se organizan, más grandes van a ser las manifestación. El Gobierno va a tener que dar un giro a todo esto», completó.
En Alta Gracia, productores agropecuarios participaron con tractores
En Alta Gracia, Córdoba más de 20 tractores acompañaron a una caravana multitudinaria de vehículos que recorrió la ciudad. «Nos encontramos en el arco de Alta Gracia a las 16.30 y ahí se nos unió una gran cantidad de personas que acompañó el reclamo: el respeto por la Constitución y la República. Había mucha gente con pancartas que está cansada de la cuarentena y el modo que se está llevando esta pandemia y que políticamente están avasallando las instituciones», enumeró Enzo Dalmasso, un productor autoconvocado que participó de la manifestación en esa zona.
Según señaló Dalmasso, la marcha en esa provincia fue un claro mensaje al gobernador Juan Schiaretti y al intendente cordobés Martín Llaryora también. «A diferencia de la marcha anterior, esta fue mucho más convocante, enérgica, de gente que está agobiada y cansada. Había quienes se cruzaban y decían yo voy a luchar por mis hijos para que no se vayan. Decían que la iban a pelear hasta el final», agregó.
En Reconquista, Santa Fe, más de 500 vehículos se sumaron a una caravana. En tanto, en Pergamino, Buenos Aires, también hubo una marcha más multitudinaria que las anteriores. Los reclamos coincidieron con los de los otros productores, según dijeron: «Hartazgo general por no poder trabajar libremente, trasladarse, viajar, poder disponer de sus pertenencias».