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«Está en las cuentas, ya que todos los años tenemos que donar un animal», dijo Marcos Manito, un productor agropecuario de Tandil a quien no solo le carnearon un ternero, sino que también le rompieron un silobolsa donde guardaba la soja. Según contó, los ladrones envolvieron la carne en el plástico del silobolsa.

Según señaló a LA NACION, el silobolsa que rompieron desde una esquina pudo haber sido utilizado así para llevarse la carne, ya que por las características del corte y la escena con la que se encontró, necesitaban transportar el animal.

A un costado del silobolsa hicieron un primer corte, pero aparentemente no pudieron «sacar un pedazo lo suficientemente grande», con lo cual decidieron romperlo de un extremo para extraer el plástico.

«Suponemos que fue el martes a la tarde, a eso de las 18, porque lo encontramos así el miércoles a la mañana cuando llegamos a laburar. Lo cortaron de dos lados, pero solo de uno se llevaron el nylon», explicó Manito, que trabaja junto a su hermano, Matías.
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El productor, de 47 años, además aclaró que, si bien los ladrones no se llevaron soja, igual generaron daño. «No se llevaron mercadería, solo el animal carneado. En otros lados ya habían carneado. Hasta hace un tiempo venía más o menos tranquilo todo», aseveró.

«Me genera impotencia y bronca, pero si tengo que decir lo que pienso no lo podría repetir. Hace mes y medio que se está dando con más frecuencia (este tipo de hecho). En el último mes se han carneado entre 15 y 20 animales en la zona y está pasando bastante seguido», describió.
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Consultado sobre el accionar de la policía rural, contestó: «Sí, se ve que andan (patrullando), pero es muy grande el partido para los 3 o 4 móviles que tiene la policía. Son muchos kilómetros para supervisar».

«Acá tenés que tener en cuenta que tenés que donar uno o dos animales por año. El ternero que me carnearon era de 220 kilos, aproximadamente. Pero ya está en las cuentas que siempre, a todos, alguna vez nos va a pasar y nos pasa. Estamos resignados», indicó. El productor hizo la denuncia del hecho ante la policía para, dijo, «dejar asentado un registro».